Arte, gastronomía, meditación y budismo en el aeropuerto
Llegando al aeropuerto de Quito localicé un cartel con mi nombre. Detrás de él, un chico que aparentaba unos 20 años, con la ropa gastada, el pelo rapado a los costados, voluminoso […]
Llegando al aeropuerto de Quito localicé un cartel con mi nombre. Detrás de él, un chico que aparentaba unos 20 años, con la ropa gastada, el pelo rapado a los costados, voluminoso […]